QUÉ VER EN CASTILLO DE GARCIMUÑOZ
Considerado uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Cuenca, sigue leyendo y descubre qué ver en Castillo de Garcimuñoz.

Presidido por uno de los castillos mejor conservados de la región, entre sus calles se puede ver la influencia de las culturas cristiana, judía y musulmana.
Visitar Castillo de Garcimuñoz
Antes de descubrir uno a uno los principales puntos de interés, aquí tienes un vídeo con todo lo que hay que ver en Castillo de Garcimuñoz.
En los alrededores, puedes aprovechar para visitar Alarcón o Belmonte.
Castillo de Castillo de Garcimuñoz
Originalmente construido por el caballero García Muñoz en el siglo XII, posteriormente pasó a manos del infante Don Juan Manuel.
Pero el aspecto que podemos ver actualmente es obra de Don Juan Manuel, primer marqués de Villena, aunque ha llegado bastante transformado.

Esto es debido a que gran parte de sus muros fueron usados para la construcción de la anexa Iglesia de San Juan Bautista, cayendo en un estado ruinoso.
Hasta principios del siglo XXI, cuando la arquitecta Izaskun Chinchilla se hizo cargo de su restauración.
El proyecto debía conservar el patrimonio histórico, pero además mejorar la accesibilidad y añadirle nuevo valor como centro cultural.
En 2016 volvió a abrir sus puertas al público, convirtiéndose en uno de los tres castillos mejor conservados y más visitados de Cuenca.
En su diseño se mezclan elementos góticos y renacentistas, añadiendo además influencias italianas.
Del exterior cabe destacar su portada principal de estilo gótico isabelino, concebida como un gran retablo de piedra.
Ya en el interior destaca el patio de armas central, repleto de estructuras escultóricas que le aportan colorido y modernidad.

El horario del Castillo de Garcimuñoz es: de miércoles a domingo de 10:30 a 14:00 y de 15:30 a 19:30 horas.
La entrada general cuesta 5€, se puede reservar online con antelación para ahorrarse la colas.
Iglesia de San Juan Bautista
Fue construida en el siglo XVII dentro del recinto palaciego, usando para ello parte de los muros del propio castillo.
Su torre campanario se alza precisamente sobre uno de los cuatro cubos defensivos, dominando las vistas de la localidad.

Del interior cabe destacar el altar mayor barroco, así como la pila bautismal.
Durante mucho tiempo acogió una de las pocas copias de la Sábana Santa que existen en el mundo, pero hoy se encuentra en el Museo Diocesano de Cuenca.
Arquitectura popular
A lo pies del castillo se extiende el entramado urbano de Castillo de Garcimuñoz, declarado Conjunto Histórico Artístico.
Está compuesto por una interesante muestra de arquitectura popular manchega, con sus blancas casas encaladas.
Muchas de ellas guardan en su interior cuevas utilizadas antiguamente como almacenes, creando casi un entramado subterráneo que se extendía por toda la villa.

Otras muestran en sus fachadas los escudos de un pasado noble, destacando la Casa Gótica del siglo XIV.
Paseando entre las estrechas callejuelas se puede descubrir el pasado judío y musulmán, no en vano la localidad fue conocida como Garcijudea.
Arquitectura religiosa
Además de la Iglesia de San Juan Bautista, es interesante destacar dos antiguos conventos que pertenecieron a la Orden de San Agustín.
El Real Monasterio de Agustinos fue fundado por Don Juan Manuel y su esposa en 1326, siendo el primer convento de monjes agustinos en la provincia de Cuenca.
Su antiguo esplendor ha quedado oculto tras los blancos muros de casas particulares, pero todavía conserva parte del claustro, algunas puertas de acceso y capillas de la iglesia.

Muy cerca permanece en pie el Convento de Nuestra Señora de Gracia, también de la Orden de San Agustín pero habitado por monjas.
Su estado de conservación no es malo, teniendo en cuenta que fue dividido tras las Desamortización de Mendizábal para convertirlo en casas particulares.

Cerro de San Juan
Hay que pasar por la Plaza Mayor, presidida por la Casa Consistorial, para llegar a uno de los mejores miradores panorámicos de la villa.
Se trata del Cerro de San Juan, llamado así porque originalmente acogía la Iglesia de San Juan.
Hoy todavía se conservan algunos restos de esa construcción, así como algunos tramos de la antigua muralla.

Cruz de Jorge Manrique
Se ubica a unos 3 kilómetros del casco histórico, en el punto exacto donde fue herido de muerte el poeta Jorge Manrique en plena Guerra de Sucesión Castellana.
El monumento consiste en un monolito de piedra con una cruz de hierro en medio, flanqueada por dos escudos tallados en la piedra.
Comer en Castillo de Garcimuñoz
Ubicada en el corazón de Cuenca, no es de extrañar que entre sus platos típicos se encuentren: ajoarriero, morteruelo, zarajos, pisto manchego o queso frito.
Más contundentes son las judías con perdiz, los asados castellanos o las carnes de ternera a la brasa.

Cómo llegar a Castillo de Garcimuñoz
El único medio de transporte público disponible es el autobús gestionado por la compañía Rubiocar, partiendo desde Cuenca.
Mucho más recomendable es el transporte particular, gracias a la buena conexión a través de la autovía A-3.